Glomerulonefritis necrotizante
DOI:
https://doi.org/10.26820/reciamuc/7.(1).enero.2023.61-67Palabras clave:
Vasculitis, Necrotizante, Renal, Inmunosupresores, GlomerulonefritisResumen
En general, las vasculitis de vaso pequeño, cuando comprometen el riñón, provocan una glomerulonefritis, con un fenotipo histológico más proliferativo en aquellas vasculitis por complejos inmunes, y un carácter más necrotizante cuando son vasculitis asociadas a ANCA. Las vasculitis renales asociadas a ANCA corresponden al mayor porcentaje de las vasculitis observables en la práctica nefrológica. La metodología utilizada para el presente trabajo de investigación, se enmarca dentro de una revisión bibliográfica de tipo documental, ya que nos vamos a ocupar de temas planteados a nivel teórico como es Glomerulonefritis necrotizante. La técnica para la recolección de datos está constituida por materiales electrónicos, estos últimos como Google Académico, PubMed, Science direct, entre otros, apoyándose para ello en el uso de descriptores en ciencias de la salud o terminología MESH. La información aquí obtenida será revisada para su posterior análisis. Esta patología tiene una alta mortalidad de no diagnosticarse ni manejarse de forma rápida, con una esperanza de vida en pacientes sin tratamiento de 5 meses. En pacientes que son tratados adecuadamente existe una sobrevida entre 8 y 9 años en aproximadamente el 80% de los casos, sin embargo, a pesar de la introducción de agentes biológicos e inmunosupresores como tratamiento que han mejorado el pronóstico de la enfermedad, existe una alta probabilidad de daño sistémico con los tratamientos prolongados, más que todo en pacientes con afectación renal en un 40% de los casos con una sobrevida hasta de 10 años. Lo que indica que es una enfermedad severa, crónica, sistémica y con altos porcentajes de recaídas.