DOI: 10.26820/reciamuc/9.(2).abril.2025.110-117 URL: https://reciamuc.com/index.php/RECIAMUC/article/view/1535 EDITORIAL: Saberes del Conocimiento REVISTA: RECIAMUC ISSN: 2588-0748 TIPO DE INVESTIGACIÓN: Artículo de revisión CÓDIGO UNESCO: 32 Ciencias Médicas PAGINAS: 110-117 Fracturas de caderas en pacientes geriátricos: rol de la tomografía computarizada multicorte en el diagnóstico precoz Hip fractures in geriatric patients: role of multislice computed tomography in early diagnosis Fracturas da anca em doentes geriátricos: papel da tomografia computorizada multislice no diagnóstico precoce Janeth Marisol Urrego Castillo 1 ; Jean Paul Pozo Chávez 2 ; Kevin Nahib Chávez Mendoza 3 ; Vladimir Alexander Mafla Sigcho 4 RECIBIDO: 02/12/2024 ACEPTADO: 15/02/2025 PUBLICADO: 30/04/2025 1. Médica; Médica Ecografista del Centro de Especialidades Médicas CDIMAGENLAB; Quito Ecuador; jane- thurregocastillo@gmail.com; https://orcid.org/0009-0001-5558-802X 2. Magíster en Nutrición y Dietética; Médico Cirujano; Investigador Independiente; Quito, Ecuador; jean. pozo.chavez.25@gmail.com; https://orcid.org/0009-0005-2299-2818 3. Médico General; Investigador Independiente; Guayaquil, Ecuador; kevin.chavez1999@hotmail.com; https://orcid.org/0009-0006-8307-804X 4. Médico Cirujano; Médico General; Investigador Independiente; Quito, Ecuador; vladimiralexandermafla@ gmail.com; https://orcid.org/0009-0009-2109-4134 CORRESPONDENCIA Janeth Marisol Urrego Castillo janethurregocastillo@gmail.com Quito, Ecuador © RECIAMUC; Editorial Saberes del Conocimiento, 2025
RESUMEN Las fracturas de cadera en pacientes geriátricos son lesiones comunes que suelen ocurrir como resultado de caídas, y representan un problema significativo de salud pública debido a las altas tasas de morbilidad y mortalidad asociadas. Estas fracturas suelen surgir en el contexto de condiciones como la osteoporosis, que debilita los huesos, aumentando el riesgo de fracturas incluso con traumas mínimos. Esta revisión bibliográfica se llevó a cabo mediante una búsqueda exhaustiva en bases de datos académicas como PubMed, Scopus y Web of Science, utilizando términos clave como "fractura de cadera", "geriátrico", "tomografía computarizada multicorte", "diagnóstico precoz" y sus equivalentes en inglés. Se incluyeron estudios publicados hasta la fecha de la búsqueda que evaluaron la utilidad de la tomografía computari- zada multicorte (TCMC) en la detección temprana de fracturas de cadera en pacientes de edad avanzada. La TCMC no solo mejora la capacidad de detectar fracturas en una población envejecida, sino que también fomenta un manejo más oportuno y efectivo de estas condiciones, contribuyendo a optimizar la atención en geriatría. Palabras clave: Fractura de cadera, Geriátrico, Tomografía computarizada multicorte, Diagnóstico precoz. ABSTRACT Hip fractures in geriatric patients are common injuries that typically occur as a result of falls, and they represent a sig- nificant public health problem due to the high rates of associated morbidity and mortality. These fractures often arise in the context of conditions such as osteoporosis, which weakens the bones, increasing the risk of fractures even with minimal trauma. This bibliographic review was carried out through a comprehensive search in academic databases such as PubMed, Scopus, and Web of Science, using keywords such as "hip fracture," "geriatric," "multislice computed tomog- raphy," "early diagnosis," and their English equivalents. Studies published up to the date of the search that evaluated the utility of multislice computed tomography (MSCT) in the early detection of hip fractures in elderly patients were included. MSCT not only improves the ability to detect fractures in an aging population but also promotes more timely and effective management of these conditions, contributing to optimizing geriatric care. Keywords: Hip fracture, Geriatric, Multislice computed tomography, Early diagnosis. RESUMO As fracturas da anca em doentes geriátricos: papel da tomografia computorizada multislice no diagnóstico precoce. As fracturas da anca em doentes geriátricos são lesões comuns que ocorrem tipicamente como resultado de quedas e representam um importante problema de saúde pública devido às elevadas taxas de morbilidade e mortalidade associa- das. Estas fracturas surgem frequentemente no contexto de condições como a osteoporose, que enfraquece os ossos, aumentando o risco de fracturas mesmo com traumatismos mínimos. Esta revisão bibliográfica foi realizada através de uma pesquisa exaustiva em bases de dados académicas como a PubMed, Scopus e Web of Science, utilizando palavras- -chave como “hip fracture”, ‘geriatric’, “multislice computed tomography”, “early diagnosis” e seus equivalentes em inglês. Foram incluídos estudos publicados até à data da pesquisa que avaliaram a utilidade da tomografia computorizada mul- tislice (MSCT) na deteção precoce de fracturas da anca em doentes idosos. A TCMS não só melhora a capacidade de deteção de fracturas numa população envelhecida, como também promove uma gestão mais atempada e eficaz destas condições, contribuindo para a otimização dos cuidados geriátricos. Palavras-chave: Fratura da anca, Geriatria, Tomografia Computorizada Multislice, Diagnóstico precoce.
112 RECIAMUC VOL. 9 Nº 2 (2025) Introducción Las fracturas de tercio proximal de fémur en pacientes mayores son en la actualidad uno de los mayores retos del régimen sanitario. No sólo influye en la calidad de vida del enfermo, desde una visión global, además conlleva una afectación socioeconómica y psicofísicas. El aumento de la esperanza de vida de la población es un hecho objetivo y está presente en los países desarrollados, lo que comporta un incremento de la inci- dencia de fracturas osteoporóticas, inclui- das las lesiones óseas del extremo proximal de fémur (1). En los países desarrollados, la incidencia de fractura de cadera es máxima entre los 75-79 años (2). Según las tendencias demográficas en Eu- ropa, dado el progresivo envejecimiento poblacional, se prevé un aumento en el nú- mero de fracturas de cadera del orden de 2 millones de personas al año, durante los próximos 25 años. Hay estudios que esti- man que, a nivel mundial, la incidencia de fractura de cadera superará los 6 millones en el año 2050 y algunos autores ya han uti- lizado el término de epidemia para calificar este aumento de la incidencia en la fractu- ra proximal de fémur (3). Las fracturas por caídas representan un 5 - 10% del total de casos, no obstante, el 95% de las fracturas de cadera en la población adulta mayor son secundarias a caídas, con mayor porcenta- je en mujeres, incluso en edades muy avan- zadas (4). La fractura de cadera tiene causa multifac- torial en la población longeva, ya que es- tán en proceso involutivo relacionado con la edad, originando una disminución de la coordinación neuromuscular, de la visión, la audición y de los sistemas de alerta au- tónomos. Según los estudios epidemioló- gicos hallan tasas muy variables en distin- tas poblaciones que se diferencian entre sí por características demográficas básicas, como geografía, raza, estilo de vida y co- morbilidades. Considerando el incremento exponencial de las fracturas de cadera asu- URREGO CASTILLO, J. M., POZO CHÁVEZ, J. P. ., CHÁVEZ MENDOZA, K. N., & MAFLA SIGCHO, V. A. me una relación directamente proporcional con la edad (4). Metodología Esta revisión bibliográfica se llevó a cabo mediante una búsqueda exhaustiva en bases de datos académicas como Pub- Med, Scopus y Web of Science, utilizando términos clave como "fractura de cadera", "geriátrico", "tomografía computarizada multicorte", "diagnóstico precoz" y sus equi- valentes en inglés. Se incluyeron estudios publicados hasta la fecha de la búsqueda que evaluaron la utilidad de la tomografía computarizada multicorte (TCMC) en la de- tección temprana de fracturas de cadera en pacientes de edad avanzada. Los datos relevantes de los estudios seleccionados fueron extraídos y sintetizados para analizar la evidencia disponible sobre la precisión diagnóstica de la TCMC y su influencia en el manejo oportuno de las fracturas de cadera en pacientes geriátricos. Resultados Factores de riesgo Los factores de riesgo de la fractura de ca- dera se pueden dividir en factores no modi- ficables y factores modificables. Los facto- res no modificables son: Sexo femenino: debido a la mayor es- peranza de vida, al mayor porcentaje de mujeres que viven solas y sobre todo, a la mayor incidencia de osteoporosis (la menopausia condiciona una situación de deprivación hormonal, principalmen- te de estrógenos, que da lugar a una pérdida progresiva y acelerada del hue- so trabecular). De hecho, en las muje- res, se produce una pérdida de densi- dad mineral ósea de aproximadamente un 2-3% cada año (5). Edad: a mayor edad mayor riesgo de fractura de cadera. Fundamentalmente por una mayor fragilidad ósea y una dis- minución de las capacidades motoras y de deambulación (5).
113 RECIAMUC VOL. 9 Nº 2 (2025) FRACTURAS DE CADERAS EN PACIENTES GERIÁTRICOS: ROL DE LA TOMOGRAFÍA COMPUTARIZADA MULTICORTE EN EL DIAGNÓSTICO PRECOZ Antecedentes familiares de fractura de cadera. Antecedentes personales de fractura de cadera: la incidencia de una segun- da fractura de cadera es de aproxima- damente 1-9% durante el primer año y 4-20% en 5 años (5). Nivel socio-económico bajo: debido fundamentalmente a que los grupos so- ciales más desfavorecidos, en general, corren más riesgo de desarrollar proble- mas de salud secundarios a estilos de vida menos saludables (5). Por otro lado, tenemos los factores de ries- go modificables: Caídas: son el principal factor de riesgo de las fracturas de cadera. En España, dos millones de personas mayores de 65 años se caen cada año secundario a la involución asociada a la edad, que con- lleva un deterioro de la coordinación con tiempos de reacción más lentos y fuerza general disminuida. Aproximadamente el 87% de las fracturas se acompañan de una caída. Y estas suelen ocurrir más frecuentemente en la propia vivienda (5). Medicación crónica: la incidencia de po- lifarmacia en pacientes ancianos es de aproximadamente un 60%. Algunos de los fármacos que aumentan el riesgo de caídas, y por tanto, el aumento de riesgo de fractura de cadera son los opioides, benzodiacepinas, fármacos dopaminér- gicos o los antidepresivos. Su relevancia como factor de riesgo reside en su meca- nismo de acción a nivel del sistema ner- vioso central. Otros fármacos relevantes podrían ser la levotiroxina que disminuye la densidad mineral ósea o los inhibidores de la bomba de protones que disminuyen la absorción digestiva de calcio (5). Osteoporosis (densidad mineral ósea disminuida): una puntuación T en la densitometría menor a -2.5 está asocia- da a un mayor riesgo de fracturas (5). Sedentarismo: la falta de actividad ge- nera una disminución de la fuerza y de la masa muscular, provocando el dete- rioro progresivo del sistema musculoes- quelético. Todo ello favoreciendo una si- tuación de sarcopenia que predispone a las caídas (5). Déficit de vitamina D: la hipovitaminosis durante la temporada de invierno, res- ponsable de una mayor fragilidad ósea, es la responsable del mayor número de fracturas de cadera durante esta esta- ción del año. Unos niveles de vitamina D por debajo de 20ng/mL se han asociado a un mayor riesgo de caídas (5). Clasificación Las fracturas de cadera se clasifican de acuerdo a diferentes criterios; la más utili- zada es la clasificación anatómica que las divide, según la localización del rasgo de fractura, en intracapsulares y extracapsu- lares. La distinción entre fracturas intracap- sulares y extracapsulares tiene importancia pronóstica. La detección precoz de una fractura intracapsular es muy importante por ser esta propensa a complicaciones; frecuentemente ocurre disrupción del apor- te sanguíneo a la cabeza femoral, lo que puede conducir a una necrosis avascular. Por otra parte, el fragmento de la fractura es a menudo frágil y proporciona un pobre anclaje para los dispositivos de fijación, lo que suele incrementar la posibilidad de no unión o mala unión (6). Dentro de las clasificaciones más utilizadas para categorizar a las FFP tenemos: Fracturas de cabeza femoral: clasifica- ción AO, clasificación de Pipkin, la mo- dificación de Yoon de Pipkin, la clasifica- ción de Brumback y la clasificación de Chiron (7). Fracturas de cuello femoral: clasifi- cación de Garden, Pauwels y clasifi- cación AO. Fracturas extracapsulares (intertrocantéricas y subtrocantéricas)
114 RECIAMUC VOL. 9 Nº 2 (2025) se las describe con la clasificación AO: A1, fractura estable en dos partes; A2, fractura inestable continua: A3, fractura inestable invertida o transversal (7). Fracturas intertrocantéricas: clasifica- ción AO, clasificación de Tronzo. Las fracturas subtrocantéricas: se localizan entre el trocánter menor y 5 cm distales al trocánter menor, esta área experimen- ta altos niveles de estrés, las fracturas en esta zona deben tener un abordaje especial con el fin de evitar malos re- sultados. Para categorizar las fracturas subtrocantéricas se recomienda utilizar la clasificación de Russell - Taylor (basa- do en la afectación del trocánter menor y la extensión de la fractura hacia la fosa piriforme), la clasificación AO/OTA y la clasificación de Seinsheimer (7). Fracturas ocultas de cadera Las fracturas ocultas que inicialmente se omiten tienen implicaciones para los pa- cientes y los clínicos. Los retrasos en el diagnóstico pueden provocar necrosis avascular (NAV), falta de consolidación y un mayor riesgo de artroplastia, dolor innece- sario, aumento de la mortalidad y compli- caciones tromboembólicas. El diagnóstico temprano de las fracturas de cadera ocul- tas acortaría la hospitalización al agilizar el tratamiento definitivo, lo que conllevaría una reducción de los costes. Kim et al., en un estudio que analizó las fracturas de cadera ocultas inicialmente omitidas, demostraron que existía un mayor riesgo de necesidad de operación en los pacientes que fueron diagnosticados en una ocasión posterior cuando regresaron después del alta (8). Lubovsky et al. compararon la TC con la RM en el diagnóstico temprano de las fracturas de cadera ocultas. Escanearon a seis pa- cientes con una posible fractura de fémur proximal con TC y luego inmediatamente después con RM. Sus hallazgos mostraron que las imágenes de TC dieron lugar a un diagnóstico erróneo en el 66% de los pa- cientes. De las cuatro fracturas del trocán- ter mayor diagnosticadas por TC, tres fue- ron rediagnosticadas como pertrocantéreas y una como subcapital después de la RM. Lubovsky et al. consideraron que una RM era más rentable, ya que proporcionaba un diagnóstico definitivo, incluida la identifi- cación de lesiones de tejidos blandos, con una sola exploración corta. Sin embargo, su grupo de comparación fue muy pequeño (solo 13 pacientes en total, solo seis pacien- tes escaneados con TC) (8). Manifestaciones clínicas y examen físico La mayoría de las FC se pueden diagnosti- car, o al menos sospechar con una buena historia clínica, los pacientes refieren gran dolor en la cadera e incapacidad para la deambulación o soportar peso, la pierna afectada se acorta y se rota externamen- te, esto debido a la tracción sin oposición del músculo iliopsoas que se inserta en el trocánter menor. El dolor se localiza de preferencia a nivel de la ingle o el trocánter mayor, existe una deformidad que va a de- pender de la configuración anatómica de la fractura, así como del grado de desplaza- miento (7). . Los pacientes con fractura intracapsular no desplazada o intertrocantérea pueden que- jarse sólo de dolor leve en la ingle y pueden soportar peso en la extremidad fracturada. En el examen físico, las fracturas no des- plazadas no causarán deformidad clínica obvia, y los pacientes tendrán una molestia moderada con el rango de movimiento de la cadera (9). Manejo de las fracturas de cadera El tratamiento de la fractura de cadera se en- foca en aliviar el dolor y restaurar la función previa, siendo la cirugía temprana (idealmen- te dentro de las 48 horas) seguida de movili- zación precoz la norma, dado los riesgos del reposo prolongado. El tratamiento no quirúr- gico, basado en reposo y tracción, conlleva complicaciones como úlceras, tromboem- bolismo e infecciones, y se reserva para pa- cientes no aptos para cirugía. El tratamiento URREGO CASTILLO, J. M., POZO CHÁVEZ, J. P. ., CHÁVEZ MENDOZA, K. N., & MAFLA SIGCHO, V. A.
115 RECIAMUC VOL. 9 Nº 2 (2025) quirúrgico incluye la osteosíntesis (fijación con tornillos, clavos o placas), utilizada en fracturas estables o en pacientes jóvenes con ciertas características, y la prótesis de sustitución (parcial o total). La hemiartro- plastia reemplaza solo la cabeza femoral o el acetábulo, indicada en ciertos tipos de fractura y en pacientes mayores con comor- bilidades o esperanza de vida limitada. La artroplastia total de cadera (ATC), que reem- plaza ambas partes, es exitosa en diversos pacientes, incluyendo jóvenes con artrosis y ancianos independientes con fracturas des- plazadas, aunque presenta contraindicacio- nes como infecciones activas o ciertas en- fermedades cardíacas. La ATC permite una carga temprana, reduce la necesidad de reintervención y evita complicaciones como la necrosis avascular. Las prótesis se fabri- can con materiales resistentes como polie- tileno y aleaciones metálicas, siguiendo un procedimiento que incluye la preparación del fémur y el acetábulo para la colocación de los componentes protésicos (10). Diagnóstico Figura 1. a) Radiografía de pelvis frente- No se observan trazos de fractura. b) TC de pelvis, reconstrucción MPR en plano coronal. No se observan trazos de fractura en cuello femoral derecho. c) y d) RM de pelvis en plano coronal en secuencia STIR y TSET1 res- pectivamente. Se observa fractura intertrocantérica derecha (flechas). Fuente: Santi et al (11). El diagnóstico precoz y el tratamiento de los pacientes que presentan fracturas del fémur proximal (fractura de cadera) ha llevado a mejorar los resultados tanto en términos de morbilidad y mortalidad. El tratamiento tem- prano ayuda a controlar el dolor y así como la reducción de la duración de la estancia hos- pitalaria. Sin embargo, se reconoce 2-10% de las fracturas puede no ser claramente visibles en las radiografías iniciales, y se re- quiere más de una técnica de imagen para hacer un diagnóstico definitivo. Estas fractu- ras se han denominado fracturas de cadera ocultas. Las directrices actuales pacientes se les debe ofrecer imágenes de tomografía computada y/o resonancia magnética (MRI), si la fractura de cadera se sospecha pesar de radiografías de pelvis anteroposterior y FRACTURAS DE CADERAS EN PACIENTES GERIÁTRICOS: ROL DE LA TOMOGRAFÍA COMPUTARIZADA MULTICORTE EN EL DIAGNÓSTICO PRECOZ
116 RECIAMUC VOL. 9 Nº 2 (2025) las radiografías de cadera laterales negati- vos. Sin embargo, la RM puede no ser ac- cesible en hospitales, es más caro que otras imágenes, y está contraindicado en algunos pacientes. Una alternativa es la tomografía computarizada multicorte (CT), que es más fácilmente disponible (11). La tomografía computarizada multicorte La tomografía computarizada multicorte (TCMC) representa un avance tecnológico significativo en la imagenología médica, ofreciendo mejoras notables en la calidad de las imágenes y abriendo nuevas apli- caciones clínicas. En el estudio del hueso temporal, las reconstrucciones de la TCMC han reemplazado la necesidad de cortes coronales directos, permitiendo exámenes más rápidos y con menor radiación para el paciente. En estudios que involucran tórax, abdomen y pelvis, la TCMC supera las li- mitaciones de la tomografía convencional al proporcionar una cobertura anatómica ex- tensa con alta resolución y la capacidad de distinguir fases vasculares cruciales para el diagnóstico de diversas patologías, permi- tiendo estudios tanto angiográficos como dirigidos a órganos específicos (12). En el ámbito musculoesquelético, la TCMC ha resurgido gracias a la alta resolución es- pacial de sus reconstrucciones multiplana- res, facilitando la obtención de imágenes en cualquier plano y simplificando el examen de pacientes politraumatizados o con dispositi- vos de inmovilización. Las reconstrucciones en 3D son valiosas para visualizar hueso, ar- ticulaciones y material de osteosíntesis, cuyo artificio puede ser minimizado con postpro- cesamiento. La TCMC también es útil en la evaluación de tejidos blandos, músculos, in- fecciones e inflamaciones, donde el contras- te intravenoso aporta información sobre la extensión de la afectación. En oncología, es fundamental para detectar infiltración tumo- ral, planificar tratamientos y guiar biopsias. Su rapidez y disponibilidad la hacen crucial en el manejo de pacientes con trauma, especial- mente si el equipo está cerca de urgencias. Finalmente, la TCMC y las imágenes 3D son invaluables en la evaluación pre y postope- ratoria de malformaciones congénitas, como la displasia de cadera, aunque en pacientes pediátricos se debe priorizar la minimización de la exposición a la radiación (12). Conclusión Las fracturas de cadera en pacientes ge- riátricos representan un desafío significativo debido a sus implicaciones en la morbilidad y mortalidad. El diagnóstico temprano es fundamental para mejorar los resultados clí- nicos, y la tomografía computarizada multi- corte (TCMC) emerge como una herramienta invaluable en este contexto. Esta tecnología ofrece imágenes detalladas y tridimensiona- les, permitiendo la identificación precisa de fracturas, incluidas aquellas que pueden no ser evidentes en radiografías convenciona- les. Además, la TCMC proporciona informa- ción sobre comorbilidades de los pacientes, facilitando una evaluación integral que pue- de influir en la planificación de intervencio- nes quirúrgicas. A pesar de sus beneficios, es esencial considerar el costo y la exposi- ción a radiación, lo que requiere un enfoque cuidadoso en su indicación. Bibliografía Bachiller Caño R, Soler de la Paz Y, Jiménez Mén- dez PA, Díaz Hernández D. Fractura de cadera en ancianos. Eur J Heal Res [Internet]. 2020 May 26;6(1):5. Available from: https://revistas.uautono- ma.cl/index.php/ejhr/article/view/1304 Sanguinetti V. Fractura de cadera como síndrome geriátrico. Geriatría clínica. 2019;13(1):11–25. González Navarro B. Fracturas de cadera en ancia- nos: Análisis de las causas de retraso para la ci- rugía y su impacto sobre la mortalidad [Internet]. Universidad de Alicante; 2019. Available from: ht- tps://observatorio-cientifico.ua.es/documentos/5e- f67e8829995218d31a533d Christy VÑX. Factores de riesgo para fractura de cadera en ancianos en Un Hospital de Huancayo Enero 2020 A Diciembre 2021. [Internet]. UNIVER- SIDAD PERUANA LOS ANDES; 2022. Available from: https://repositorio.upla.edu.pe/bitstream/ handle/20.500.12848/4342/TESIS.VILCHEZ OK.pdf?sequence=1&isAllowed=y URREGO CASTILLO, J. M., POZO CHÁVEZ, J. P. ., CHÁVEZ MENDOZA, K. N., & MAFLA SIGCHO, V. A.
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