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RECIMAUC VOL. 7 Nº 2 (2023)
Introducción
Desde finales del siglo XX la educación su-
perior ha sido sometida prácticamente a
una refundación, que es mucho más que
una reforma. Tales cambios pasan por la
definición de nuevos roles y retos, ya que la
dinámica evolución social y económica, de-
rivada de la globalización, les plantea a los
actores de este nivel educativo mayores ni-
veles de eficiencia y garantía de calidad de
los servicios públicos que ofrecen. En este
marco, los organismos mundiales, como la
Organización de las Naciones Unidad para
la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNES-
CO), y las asociaciones internacionales de
quienes imparten la educación superior,
se han ocupado en impulsar, al interior de
los países, políticas públicas que se busca
deriven en estrategias institucionales, todo
para garantizar la calidad y mayores niveles
de eficiencia de la educación superior (Ra-
mírez, 2013).
Una de las consecuencias de los cambios
que se están produciendo en el mundo ac-
tual es el giro trascendental del direccio-
namiento de la educación superior, la cual
está llamada a contribuir en la construcción
de una sociedad más próspera, justa y so-
lidaria, y con un modelo de desarrollo hu-
mano integral sustentable. Cumplir con esta
responsabilidad social exige de las Insti-
tuciones de Educación Superior (IES) un
perfeccionamiento continuo de la gestión
universitaria, de la que forma parte la plani-
ficación estratégica, cuyo objetivo principal
es contribuir al conocimiento de la institu-
ción y a la orientación de los cambios nece-
sarios para responder a las demandas de
un entorno dinámico, incierto y turbulento,
entre otros (Rivero & López, 2014).
En el desarrollo de las concepciones sobre
la gestión de dirección apoyados en sus
estrategias, se han definido tres momentos
básicos, tanto en el marco de las activida-
des lucrativas como no lucrativas y son: la
planeación, la ejecución y el control; ellas
constituyen una unidad dialéctica; pues la
planeación estratégica garantiza las con-
diciones para la realización adecuada de
la implementación y el control, y éstas a la
vez, garantizan la información para la eva-
luación de la efectividad del proceso de
planeación y la corrección de éste, por lo
tanto es indispensable que estos elemen-
tos estén implícitos en la estrategia (Macías
Sanchez, 2016).
La planificación estratégica en una institu-
ción de educación superior, es un proce-
so continuo, técnico-político, sistemático,
reflexivo, participativo, crítico y autocrítico,
instructivo, flexible, integral y orientador,
que promueve el cambio, y precede y presi-
de la acción para la toma de decisiones. La
estructura metodológica de la planificación
estratégica en una institución de educación
superior está integrada por varios momen-
tos que vinculan el pasado, el presente y
el futuro; estructura esta que se apoya en
flujos de informaciones externas e internas
pertinentes, y busca alcanzar determinados
objetivos institucionales, utilizando adecua-
damente los recursos disponibles, y con-
siderando la cultura organizacional, entre
otros elementos. Se considera que la pla-
nificación estratégica favorece el cambio
positivo, que orienta a las instituciones de
educación superior de un estado real hacia
uno deseado y factible de alcanzar, iden-
tificando la razón de ser, las debilidades,
fortalezas, oportunidades y amenazas, así
como los principales implicados (Madrigal
Castro & Calderón Mora, 2017).
Las instituciones de educación superior
(IES) deberán asumir un nuevo modelo pa-
radigmático de planificación estratégica
que sea eficaz en los diferentes ámbitos
gerencia alta, gerencia media y gerencia
operativa. Un modelo viable adaptado a la
estructura y funcionamiento organizacional,
el cual deberá proporcionar un mecanismo
instrumental a la alta gerencia; lineamientos,
estrategias, políticas y objetivos. Además,
un conocimiento de la situación interna y
externa en función de su entorno sociocul-
tural económico y político proporcionara
GUADALUPE SÁNCHEZ, K. W., & ZÚÑIGA MUÑOZ, H. C.